Alfonso Pardo, un mundo bajo el agua
El joven, afincado en el municipio villanovense, se proclamó subcampeón de la Copa de España de la Federación
Villanueva tiene entre sus vecinos al reciente subcampeón de la Copa de España de buceo de competición, un triunfo que se suma al palmarés de este deportista, llamado Alfonso Pardo, que va incrementándose con el paso del tiempo. El joven ama este deporte tan especializado, ya que requiere de una gran condición física y de unos conocimientos muy concretos sobre la inmersión, la administración del aire, etc.
Hace unos años, su pasión por el buceo le llevó a introducirse en este mundillo que, con el paso de los años, se ha convertido en uno de sus modos de vida. Así, este villanovense de adopción es geólogo y trabaja en la Escuela Politécnica de Huesca, en el Departamento de Ciencias Ambientales. Es aquí donde fusiona su hobbie con su trabajo, ya que pertenece a un grupo que realiza investigaciones, por ejemplo, en los ibones del Pirineo aragonés, dado que en esta Comunidad Autónoma "somos pioneros en España en buceo bajo hielo", reconoce el experto.
Esta especialización le ha llevado a participar en varias campañas que le han conducido al fondo de distintos mares. Por ejemplo, estuvo entre los restos del Salem Express, que naufragó el 15 de diciembre de 1991 en el mar Rojo. "El interior estaba lleno de pertenencias personales de los pasajeros. Había sillitas de bebé, automóviles, maletas con ropa, etc.", manifiesta el buceador. Una experiencia sobrecogedora por la magnitud de la tragedia, ya que murieron entre 500 y 1.000 personas, según los periódicos egipcios, aunque las fuentes oficiales niegan estas cifras (reconoce sólo medio centenar, dado que había más pasajeros de los permitidos).
En Aragón, como no hay mar, no suceden este tipo de accidentes, aunque sí existen muchos pantanos y, por supuesto, el río Ebro, en el que se puede requerir la intervención de un buceador. En concreto, los pantanos de Mediano y El Grado "son muy conocidos entre los amantes de este deporte, especialmente entre los de fuera de Aragón, aunque la tradición deportiva en nuestra Comunidad Autónoma es grande, a pesar de no tener playa", dice.
No obstante, hay 20 clubes de buceo repartidos por Zaragoza, Huesca y Teruel. Además, la afición por este deporte viene dada porque "la sección de Pontoneros de actividades acuáticas del Ejército de Tierra está en Monzalbarba, donde me tocó hacer el servicio militar y, donde, posteriormente, fue buceador de apoyo de las actividades anfibias", explica Alfonso Pardo. Ahora, como integrante de la Federación Aragonesa de Actividades Subacuáticas ofrece cursos de formación, como el que se desarrollará en Villanueva de Gállego el 26 de diciembre. Será un bautismo acuático en el que los vecinos del municipio se podrán acercar a esta disciplina "que puede hacer todo el mundo. Únicamente está limitada a personas que tienen algún problema cardiaco, asma o claustrofobia, porque a través de las gafas se ve como si fuera un túnel", apunta este profesional, instructor tres estrellas --el máximo nivel que otorga la Federación--.
Pero también se puede hacer de forma menos profesional, el llamado buceo recreativo, un modo relajante de desconectar de la rutina, y, ahora, al alcance de todos, dado que se puede hacer en una piscina, de forma fácil, ya que los cursos de la Federación están gradados.
Fuente: Crónica del Bajo Gállego
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