Gómez Acebo se abrirá al tráfico definitivamente el 23 de febrero

Se reanudarán las rutas de autobús en la vía, en la que se colocarán dos nuevas marquesinas

El 23 de febrero es la fecha que el consistorio villanovense ha establecido para la apertura al tráfico rodado del último tramo de la avenida Gómez Acebo del municipio. Esto será posible porque ya se habrán terminado las obras en el último de los tramos, el que va de la carretera de Castejón a la Sala Capitol.

Además, en esta fecha se reanudarán las rutas de autobús por esta calle, en la que se instalarán, en marzo, dos marquesinas, una frente a la farmacia y otra en el número 118 de dicha vía, frente Al antiguo Casino.

Las obras de la avenida Gómez Acebo comenzaron en octubre del año pasado. Se trata de una vía de 1,9 kilómetros que atraviesa el municipio. De ahí, que al ser una de las arterias principales de la localidad los trabajos hayan ocasionado muchas molestias a los conductores, que han tenido que tomar pasos alternativos. Si bien, tras esta remodelación, que ha supuesto una inversión de 2,9 millones de euros, la zona se ha convertido en un bonito entorno, ya que se han ampliado las aceras, que tienen dos metros de anchura, se han instalado bancos, papeleras, farolas con doble luminaria y aparcabicis. También se han incorporado 9 pasos de cebra con rampas reductoras de velocidad.

Igualmente se ha reorganizado el tráfico hacia las calles laterales de manera que el tránsito de camiones sea menor. El objetivo es que la avenida sea un punto de encuentro para los vecinos y que se potencie la zona comercial y la actividad.

Además, para dotar de singularidad el proyecto se ha instalado una escultura del artista aragonés Francisco Simón, en la rotonda de entrada a Villanueva de Gállego que representa la "renovación de la localidad", dice José Manuel Garisa, alcalde del municipio.

Junto a los cambios estéticos, se ha llevado a cabo la renovación de la red de saneamiento, de abastecimiento de agua y gas y de canalización de telefonía y cable. Estos trabajos, además de llevar hasta el municipio servicios que hasta ahora no tenía como el cable, se han realizado de manera que las operadoras no necesitan abrir nuevas zanjas y el tendido telefónico desaparece y queda soterrado.

Fuente: Crónica del Bajo Gállego