Desarrollar la intuición, realizar una completa reproducción y estar continuamente alerta, las claves del programa 'Callejeros'

Aforo más que completo en la charla que ha tenido lugar esta mañana en el Aula Magna de la Facultad de Comunicación para recibir al reportero del programa “Callejeros”, Jalís de la Serna. Esta conferencia, enmarcada en el seminario La tele por dentro, ha estado cargada de anécdotas y secuencias del programa que reflejaban la realidad en la que trabajan estos reporteros. Jalís de la Serna ha conducido su intervención en función de distintos extractos del programa que recogían historias reales de distintos ciudadanos envueltos en el mundo de la droga o la prostitución, así como otras más emotivas como la secuencia grabada de un parto.

Con estas imágenes el reportero ha querido ejemplarizar distintas maneras de afrontar un reportaje en función de si el personaje da juego, si tiene una historia detrás que merece la pena seguir o si, por el contrario, es algo que surge de manera espontánea sin ninguna labor de preproducción y donde según explica “hay que tener intuición y reflejos para darse cuenta que una persona, que en un principio puede pasar desapercibida, tiene una historia interesante que contar”.

También es necesario transmitir confianza para que la gente no se sienta amenazada y pueda sentirse cómoda con las preguntas o las grabaciones que realizamos, ha añadido el conferenciante.

 Una vez repasadas distintas situaciones divertidas, emotivas, injustas o espontáneas ha comenzado el turno de preguntas del público relacionadas con la selección de temas o el componente de morbo que tiene el programa, entre otras.

Frente a estas cuestiones Jalís de la Serna ha querido aclarar que este programa no sólo recoge la marginalidad de los barrios sino que abarca el lujo, la vivienda, reportajes de estética, de animales aunque la gente se queda con lo que más le impacta y le toca de cerca en su barrio, afirma.

También ha mostrado su desacuerdo con la gente que opina que este programa busca el morbo y de ahí su éxito, en este caso, el conferenciante lo achaca a envidias de audiencia o a personas que prefieren mirar hacia otro lado cuando se reflejan situaciones duras de miseria. “No desvirtuamos la realidad, como algunos nos acusan, solo vamos con una cámara e intentamos reflejar realidades sociales de la manera más cercana”.

 

Fuente: Universidad San Jorge