Blogia
Noticias de Villanueva de Gállego

Crece la preocupación y la desconfianza

La información tardía sobre la contaminación del Gállego, las discrepancias entre la DGA y la CHE a la hora de determinar a quién corresponde investigar las causas y el origen de la misma, está minando la confianza de los municipios, preocupados ante la falta de soluciones

Gran inquietud y mucha desconfianza. Estas fueron las sensaciones que transmitieron ayer la mayor parte de los habitantes de los pueblos del Gállego que se manifestaron en Zaragoza para hacer patente la preocupación que hay en toda la
zona tras las noticias sobre la contaminación de las aguas del río por lindano.
Gustavo Ortas y Fernando López, dos de los concentrados, explicaron que, sobre todo, les inquieta la falta de información y la sensación de que el problema de
la contaminación del río «está fuera de control». López, concejal del Ayuntamiento de Santa Eulalia, dijo que la Administración «no sabe por dónde le da el aire» en este asunto y mostró su preocupación por los efectos que la contaminación pueda tener no solo para la salud sino para la imagen de estos pueblos y para el turismo.
Ortas, que trabaja en la compañía Ur Pirineos (que organiza actividades acuáticas en el Gállego), así lo confirmó. Ortas recordó los perjuicios que el cierre del pantano de la Peña ha generado en las empresas que ofrecen descenso de aguas bravas y rafting. Mariano Polanco, de Ecologistas en Acción, y Jesús Estachod, presidente de la coordinadora Biscarrués-Mallos de Riglos, fueron especialmente críticos con la intervención del Gobierno de Aragón. Ambos participaron ayer, junto con otros doce representantes de las localidades afectadas, en una reunión con el consejero de Agricultura, Modesto Lobón, y otros responsables de la Administración.
A su salida, explicaron a los concentrados que estaban más preocupados que antes del encuentro, ya que el mensaje que les habían trasladado es que no se sabe
el origen, ni las causas de la contaminación, y que se desconocen las razones por las que ha aumentado la concentración de lindano en el agua del Gállego, en
algunos tramos del río. «Es el colmo del despropósito», dijo Estachod, que pidió que se depuren responsabilidades y se de una solución definitiva. Polanco, por su
parte, calificó la reunión de «demencial » y reiteró su preocupación: «Hemos constatado que el director general de Protección Civil –apuntó– no tuvo noticia de la contaminación hasta el 11 de septiembre, cuando los análisis de la CHE ya detectaron esta situación a principios de julio».

Fuente: Página 5 de la edición imresa del Heraldo de Aragón del 4/10/14.

0 comentarios